¿Qué tratamientos del pie de atleta son recomendables?


El pie de atleta es una enfermedad de la piel muy frecuente producida por hongos (dermatofitos). Las personas que la sufren pueden tratarse con medicamentos adecuados como Canespie® Bifonazol. Las molestias mejoran considerablemente pocos días después de comenzar el tratamiento. Siempre se debe finalizar el tratamiento para asegurar la eliminación del pie de atleta y evitar recaídas.


El pie de atleta es una afección que padece una gran mayoría de la población, siete de cada diez personas1, una o varias veces a lo largo de su vida. Naturalmente, el pie de atleta causa molestias desagradables. Pero afortunadamente, hoy en día existen tratamientos excelentes para tratarla que te aliviarán y curarán esta enfermedad.

¿Cómo se manifiesta el pie de atleta?

Esta enfermedad se manifiesta con síntomas típicos. Las molestias más importantes son:

  • Ardor o picor en los dedos de los pies o los pies.
  • Alteraciones entre los dedos de la piel, en particular grietas, coloraciones blancas y ablandamiento.
  • Piel agrietada tanto en las plantas como en los talones.

Consejo: si observas estos síntomas en tus pies, no lo dudes y trátate inmediatamente contra el pie de atleta. Cuanto antes empieces el tratamiento, más fácil será todo.

¿Cuándo deberás acudir al médico?

En principio, el propio paciente puede realizar el tratamiento del pie de atleta, pero existen excepciones importantes en las que las personas afectadas deberían recabar el consejo de un facultativo. En particular en los casos relacionados a continuación es necesario consultar al médico:

  • Las molestias son persistentes y no desaparecen tras el tratamiento.
  • Las mujeres embarazadas, que deben seguir un tratamiento médico.
  • Pacientes con enfermedades de base como la diabetes, u otras enfermedades de la piel.
  • Si no mejora o empeora tras 7 días de tratamiento.

Nota: Por supuesto, también deberás concertar una cita con tu médico si no estás totalmente seguro del diagnóstico de pie de atleta.

¿Cómo puedo tratar el pie de atleta?

El producto de Bayer Canespie® Bifonazol tan solo se debe usar con 1 aplicación al día durante 3 semanas. El picor se irá en los primeros días, aunque es vital cumplir con el tratamiento entero para exterminar la infección. Además, Canespie® Bifonazol puede comprarse en farmacia y es muy fácil de usar.

Cómo realizar un tratamiento de pie de atleta


Sigue las instrucciones del prospecto del medicamento. Las pomadas, cremas y sprays de alta eficacia, que se basan en un antimicótico de amplio espectro, resultan especialmente fiables porque actúan contra los principales patógenos involucrados en el pie de atleta. Deberás aplicar estos fármacos sobre los lugares infectados según indique el prospecto. Resulta de crucial importancia para un tratamiento eficaz del pie de atleta ser constante durante todo el periodo recomendado, aunque los síntomas ya hayan remitido.

Consejo: Lávate muy bien las manos cada vez que apliques el fármaco. Solo así evitarás de forma fiable que el pie de atleta se transmita a otras partes del cuerpo a través de las esporas que quedan adheridas a las manos.

¿Con qué rapidez actúa un tratamiento para el pie de atleta?


Canespie® Bifonazol de Bayer es uno de los productos indicado para la eliminación del pie de atleta. Este producto es eficaz con tan solo 1 aplicación al día durante 3 semanas. Los síntomas desaparecerán en los primeros días, pero es necesario continuar con la aplicación del antimicótico hasta finalizar el tratamiento. Si reaccionas al primer indicio de pie de atleta y cumples estrictamente el tratamiento, evitarás que la infección empeore y conseguirás eliminarla.

¿Qué se puede hacer después del tratamiento para evitar una reinfección?


Si sigues algunas reglas, ayudarás a evitar un nuevo contagio. Muchas de estas medidas, tienen en cuenta que el ambiente húmedo y cálido, es un caldo de cultivo para los patógenos causantes del pie de atleta. Para evitar volver a infectarte deberías, en particular:

  • Llevar calcetines de algodón o de otros materiales naturales y cambiarlos a diario.
  • No caminar descalzo en duchas, vestidores y baños, sino ponerse chancletas y secarte bien los pies cada vez que te los laves, especialmente entre los dedos.
  • Usar productos que mantengan los pies secos evitando la acumulación de sudor, por ejemplo, un desodorante de pies.
  • Quitarte los zapatos cuando estés en casa para que puedan airearse.
  • Cambiarte a menudo las toallas y no compartirlas con nadie.

Si a pesar de estas medidas notas los primeros síntomas de la enfermedad, no lo dudes y comienza inmediatamente con el tratamiento.

1 Referencia: Ilkit M, Durdu M. Tinea pedis: the etiology and global epidemiology of a common fungal infection. Crit Rev Microbiol. 2015;41(3):374-88.