Tus pies merecen un tratamiento adecuado
En función de la problemática que presente tu pie, deberás darle un tratamiento u otro.
A continuación, te detallamos los problemas y necesidades más comunes, así como la mejor solución para cada caso. ¿Cuál es el tuyo?
1. Evitar el sudor y secundariamente el olor de pies de carácter leve u ocasional.
Si quieres evitar el sudor del pie, además de evitar el olor que éste pueda ocasionar, te invitamos a usar un producto regulador del sudor excesivo como Funsol® Polvo o un producto antitranspirante como Funsol® Spray y CanesCare® Pro·Tect Spray. Puedes aplicarlo por la mañana después de la ducha sobre todo en épocas de primavera-verano, en las que el pie suda más o cuando uses zapatos que no transpiren. Si vas al gimnasio, también puedes usarlo antes de ponerte el calzado deportivo. Puedes aplicarlo directamente en los pies o para una mayor protección también puedes aplicarlo en zapatos antes o después de usarlos.
2. Dar solución a un problema grave de olor de pies.
Si tus pies sufren un fuerte olor, deberás combatirlo con productos absorbentes del sudor excesivo como Funsol® Polvo o antitranspirantes como Funsol® Spray y CanesCare® Pro·Tect Spray, a través de una rutina y disciplina diaria. Usa el producto tanto por la mañana después de la ducha, para evitar el mal olor, como por la noche antes de ir a dormir para sentir tus pies limpios y relajados. Puedes aplicarlo directamente en los pies o para una mayor protección también puedes aplicarlo en zapatos antes o después de usarlos.
3. Prevenir los hongos ante una necesidad puntual.
Tal y como hemos comentado en apartados anteriores, hay lugares (como las duchas y baños públicos del gimnasio) que pueden aumentar la probabilidad de contraer hongos en los pies. Por ello, antes de ponerse el calcetín para hacer deporte, es recomendable usar un producto absorbente del sudor excesivo como Funsol® Polvo o producto antitranspirante como Funsol® Spray que ayude a evitar las situaciones de humedad en los pies.